CÓMO SE APRUEBA UN PALO DE GOLF

Vista del campo de golf Río Real

¿Cómo se aprueba un palo de golf? ¿Qué sucede cuando marcas tan conocidas como Titleist, Taylormade o Callaway diseñan un nuevo driver?

Con la llegada de los programas de diseño asistido por ordenador como el CAD en los años 80 el mundo de los diseños de los palos de golf cambió para siempre.

Los ingenieros han podido diseñar palos con ángulos, peso y materiales, que han proporcionado a los jugadores una gran ayuda a la hora de ser más competitivos.

Por eso es importante conocer como se aprueba un palo de golf y cuales son los estándares a la hora de dar el visto bueno.

El efecto trampolín en el driver

Por ejemplo si hablamos de un driver a la cabeza de este se le podría dar un efecto trampolín. Este efecto trampolín se consigue en la cabeza del driver.

Como los fabricantes no pueden pasar de determinados grados en el ángulo del frente de la cabeza, han optado por usar materiales muy sofisticados que ayudan al jugador a pegarle a la bola con más velocidad.

Aquí es donde aparece el efecto trampolín (trampoline effect en inglés), si vemos con detenimiento la cabeza de nuestro driver, vamos ver que no es 100% plana. La cabeza está un poco abombada hacía adentro. Este ángulo ayuda a pegarle mejor a la bola.

Las reglas indican que la cabeza del driver debe permanecer rígida en el impacto. Y por ello los fabricantes utilizan aleaciones de aceros especiales como el Maraging steel. El Maraging steel es un acero con una gran composición de niquel que ayuda a golpear la bola con más velocidad.

Normalmente el Maraging steel y otras aleaciones solo se utiliza en el frente de la bola, en la parte de la cabeza que hace contacto con la bola. La razón de porqué sólo se usa en esa parte de la cabeza del driver es que esa aleación no es tan resistente a la corrosión como el acero inoxidable que se utiliza normalmente en los palos de golf.

Cuando se golpea la bola con un driver, que lleva en la cabeza la aleación tipo Maraging steel, lo que sucede es lo siguiente. Esta aleación es extremadamente dura hasta que lo golpeas con una fuerza superior a las 2000 libras o le pegas a la bola de golf con una velocidad mayor a 100 km/h. Entonces cambia su forma momentaneamente a un poco más concava.

¿Qué hace la USGA para evitar el efecto trampolín?

Los fabricantes cada vez optan por aleaciones que se hagan más concavas a la hora de impactar con la bola. Y de ese modo alcanzar más velocidad.

Por ello la USGA cuenta con una máquina para probar cada driver y definir en cada caso si el efecto trampolín es demasiado. Si es demasiado ese palo no será aprobador para comercializarse y no podrá ser usado ni por profesionales ni por amateurs.

Para probar cuanta energía se le transmite a la bola la USGA mide el coefeciente de restitución a través de un péndulo.

Para ello el péndulo, que tiene el mismo radio que una bola de golf golpea 3 veces y desde 3 diferentes altura la cabeza del driver.

Con el acelerometro se produce una señal que es recibida por un osciloscopio y este transmite la medición de esos 9 golpes al ordenador a través del usb.

Este confirmará si la cabeza del driver está dentro de los rangos de rigidez de la USGA o bien es un palo «ilegal».