Con estos 10 consejos para niños que se inician en el golf, padres y golfistas infantiles disfrutarán de este maravilloso deporte.
El golf es un placer único que se puede disfrutar a cualquier edad. Enseñe a un niño a jugar y tendrá una base para décadas de diversión en el campo junto a amigos y familiares. De lo que se trata es que los golfistas intantiles se diviertan aprendiendo y cultiven su interés inspirándose en otras actividades atléticas.
Nueve consejos para que el golf sea divertido y emocionante para los golfistas jóvenes.
1. Busque un profesional del golf, dele a su hijo espacio para crecer. Investigue su área y busque un instructor que se especialice en programas de golf para jóvenes, o al menos, tenga una experiencia significativa en la enseñanza de niños. Luego, ofrezca apoyo y aliento, pero permita que el profesional le dé consejos de golf.
Demasiada información de demasiadas fuentes puede quitarle la alegría al proceso de aprender a jugar al golf.
2. Las clases en grupo funcionan mejor. La enseñanza debe seguir un plan. Los niños que aprenden, ríen, mejoran y luchan juntos tienen más probabilidades de triunfar en todos los aspectos de la vida.
La competencia mejora el juego. Y también nos alecciona que hay otros iguales o mejores que nosotros. Así que hay que trabajar más para ganarles.
3. Los niños más pequeños necesitan variedad. Nunca eres demasiado joven para aprender, pero los más pequeños necesitan una combinación de actividades para mantener las clases y las lecciones frescas y emocionantes.
Para Paul Johnson, maestro de golf profesional en Lost Plantation en Rincon (Georgia), esto podría incluir un juego improvisado de una sesión de carreras de obstáculos o golpear pelotas de tenis en lugar de bolas de golf para coger. confianza y romper la monotonía.
Cualquier actividad que enfatice la coordinación ojo-mano, el equilibrio o el movimiento atlético beneficia el desarrollo temprano de un golfista. Incluso, si no incluye tocar un palo de golf o una bola.
4. No se preocupe por los detalles. Los fundamentos sólidos son importantes, pero está bien que un principiante tenga fallos en su agarre o en su postura siempre y cuando esté golpeando la bola, divirtiéndose y deseando volver al campo.
Muchos profesionales de la enseñanza del golf creen que el placer de sus estudiantes es más importante que aplicar un estrés indebido en busca de la perfección. Si llega el momento, le gusta convertir a su alumno en el maestro, pedirle que le pregunte por qué tal cambio podría ser necesario. Eso mantiene a los estudiantes interesados en la decisión.
5. Ponga rumbo – tan pronto como sea posible. Los jóvenes que pasan demasiado tiempo golpeando bolas en el campo de prácticas pueden perder fácilmente el interés.
Además, el campo de golf es donde el juego realmente cobra vida. Y se convierte en algo divertido y fresco. Ya que plantea un conjunto único de circunstancias cada día. Un golfista comprende la razón de dedicar tiempo a practicar el juego de palos o bunker una vez que se enfrenta a esos desafíos en el campo de golf.
6. Deje que su hijo decida. No todos los golfistas junior querrán participar en torneos. A algunos les gustaría competir, pero solo en grupo. Y otros pueden disfrutar del juego simplemente porque pueden estar al aire libre y pasar horas compartiendo buenos golpes y risas con amigos.
Los padres que empujan a sus hijos por el camino equivocado pueden alejar a sus hijos del golf. La decisión de buscar un triunfo en un torneo, una beca universitaria, o una carrera profesional siempre debe provenir del golfista y de nadie más.
7. Las depresiones son parte de los deportes. Todos los golfistas llegan a un punto en el que los resultados no mejoran porque los putts no caen, o fallan su objetivo.
Comprenda que todos los atletas tienen tramos en los que simplemente no rinden lo mejor posible. A veces por razones que desafían toda explicación, si es que pueden ser identificadas.
8. Padres, no tengan prisa en gastar dinero. Es tentador salir corriendo y comprar palos de golf caros y ropa llamativa tan pronto como su hijo o hija mencionen que les gustaría pasar una tarde en el campo de golf.
Primero lleve a su hijo a jugar. Muchos instructores tienen palos disponibles para que los niños los usen durante las clases.
Si su hijo decide que le gusta el golf y quiere seguir jugando, busque el equipo adecuado para él. La longitud y el peso adecuados del palo son imprescindibles para los principiantes jóvenes. Los palos demasiado largos o pesados pueden introducir malos hábitos de swing.
9. Disfruten de este deporte juntos. Padre e hijo, madre e hija. Camine nueve hoyos en una cálida tarde de verano. Comience una tradición navideña de compartir una ronda y obsérvela ya sea que llueva, aguanieve o viento.
Mire los campeonatos mas importantes, aprendan juntos la rica historia del juego y habla sobre tus jugadores favoritos. Asista a un evento del European Tour, PGA o LPGA Tour y observe a quienes juegan mejor.
10. Encuentra tiempo para una partida de golf familiar en unas vacaciones. De esta forma todos podrán entender su pasión por este deporte y quizás se convierta en un hábito familiar.
Celebra los buenos golpes, olvídate de los malos, ríe mucho y recuerda los buenos momentos