No es una huida, él no lo ve así. Después de abandonar la Costa del Sol sin rumbo fijo, Jack White desembarca en Asturias con la firme intención de olvidar. Sin embargo, mientras descubre una tierra hermosa y hospitalaria, Jack se mete de lleno y sin querer en otro problema pero, esta vez, está solo.
Después de Tal Vez, Quizá y A lo Mejor, la saga de Jack White recobra vida con un protagonista en su pleno esplendor. En esta cuarta entrega, Pedro Lasuén imprime su sello personal mezclando humor y acción y, como de costumbre, sorprende al lector con una trama tan real como original.