Existen reglas de golf a las que no les prestamos mucha atención. Pero olvidarlas puede significar una penalización o perder el hoyo.
Todos tenemos al golf como un deporte donde las reglas son observadas a carta cabal por los jugadores. Cada jugador se responsabiliza por su juego y no intenta lograr una ventaja de una forma artera.
Sin embargo, sucede a veces que olvidamos reglas y eso nos puede hacer parecer tramposos a los ojos de los demás jugadores.
Vamos a echar un vistazo a algunas reglas que quizás nos cuesta realmente recordar.
Problemas con troncos, raices o bola injugable. Si el jugador encuentra que la bola es demasiado difícil de jugar Bien sea porque acumularás muchos golpes o bien sea porque pones en riesgo un palo que puede valer de 100 a 300 Euros, lo más lógico es dropar la bola.
Para ello tenemos varias posibilidades: Podemos volver a jugar desde donde se jugó el golpe anterior, también se puede dropar hacia atrás en línea con la bandera. O bien dropar a dos palos de distancia (se puede usar el palo más largo) de donde se encuentra la pelota. Naturalmente esto viene con un golpe de castigo. Pero siempre es mejor perder un poco que perder todo.
Otro punto a recordar es qué sucede con una bola fuera de límites o perdida. Si en 5 minutos no encontramos la bola o esta salió del campo o de las estacas blancas, sólo hay una solución: Se jugará de nuevo desde donde se golpeó anteriormente. El jugador no tiene penalización por esto. Por esta razón vemos a veces a los profesionales buscar la bola perdida con poco interés. Ya que en caso de encontrarla puede ser una bola injugable.