LA CABALLEROSIDAD EN EL GOLF

La caballerosidad en el golf está intacta. Siempre se ha dicho que el golf es un deporte muy noble. Y hay detalles como este que lo confirman y además humanizan un deporte que demasiadas veces ha sido considerado como elitista.

En el Open de Argentina en Noviembre 2019, el jugador Brandon Matthews tuvo un impresionante detalle con un espectador, que chilló inesperadamente mientras ejecutaba un putt en el tercer hoyo del playoff.

De este golpe dependía ganar el campeonato y con este venía una invitación al Open Royal St George’s.

En palabras del jugador la acción transcurrió de la siguiente manera: » Saque el hierro buscando hacer un birdie, me coloqué y en ese momento escuche un grito o gemido. Eso me hizo encogerme y en el mismo instante supe que había fallado».

Al fallar el putt perdió el torneo y Matthews se retriró muy contrariado a los vestuarios.

El grito de Juanchi

En los vestuarios el director del Open de Argentina, Claudio Rivas, le informó que quien había gritado era Juanchi. Un trabajador del campo con síndrome de Down, quien no pudo aguantar la tensión del momento.

Matthews le entrega su guante a Juanchi.

El golfista casi estalló en lagrimas al oír esto e inmediatamente volvió al campo de golf para buscar a Juanchi. Lo abrazó y lo obsequió con uno de sus guantes diciéndole que el error en el golpe no había sido culpa suya.

Este gesto de caballerosidad pronto se hizo viral y ha recorrido muchos noticieros y páginas web.

El jugador expresó que deseaba hacer participe a Juanchi de que no estaba enfadado con él y tampoco consigo mismo. Simplemente a veces las cosas suceden y hay que aceptarlo.

Un golfista de 300 yardas y 190 millas por hora

El jugador es muy conocido por cargar una sola madera en su bolsa. Con su driver es capaz de lograr tiros de más de 300 yardas, por lo que considera mejor llevar más wedges. Carga con 4 wedges de 62, 57, 52 y 48 grados para obtner más finura y precisión cerca del green.

Aunque últimamente ha tenido problemas en su espalda baja, Matthews tiene una condición natural para darle con velocidad a la bola.

En sus comienzos como jugador lograba una medias de 123 millas por hora (unos 197 km/h) y en los últimos tiempos ha subido hasta 196 millas por hora (315 km/h), por lo que no es de extrañar que siga teniendo muchos éxitos en el Tour PGA de Latinoamerica.

Por supuesto también participa en el Korn Ferry Tour pues su ambición es pasar a la PGA y poder medirse al tú por tú con todas las grandes estrellas del golf.