Desde que en el año 2004 se inaugurara el campo de golf, la finca Palomarejos ha ahorrado un millón y medio de metros cúbicos de agua.
Estos datos los ofrece el Head Greenkeeper de Palomarejos Golf, Javier Fuentes, a la hora de desmentir la falsa idea de que los campos de golf gastan mucha agua. Los actuales campos ya están diseñados con la mirada puesta en el ahorro de la mayor cantidad de agua posible, y ello se sustenta fundamentalmente en la mejora de las infraestructuras del propio campo (sustratos, drenajes, diseño del riego etc.) y en el uso de variedades de céspedes con bajo consumo de agua.
Sólo 6000 metros cúbicos por hectárea
Javier Fuentes, que además es Vicepresidente de la Asociación Española de Greenkeepers, recalca que, con los sistemas actuales, se realiza una gestión responsable y eficiente del agua afirmando que “una hectárea de golf necesita 6.000 m3 de agua al año; mientras que la misma superficie de lechuga iceberg consume 8.400 m3, el cultivo de una hectárea de maíz de grano requiere 9.000 m3 y una hectárea de alfalfa supone un gasto de 10.000 m3”.
El actual Palomarejos Golf ocupa una extensión de 54 hectáreas de la superficie total de la antigua finca agrícola, mientras que el recorrido de juego se extiende a lo largo de 34 hectáreas de este campo pionero de Castilla-La Mancha.
En toda esta extensión «salvo en las zonas de los green”, se usa un tipo de gramínea que está adaptada a un bajo consumo de agua, a lo que se unen también sistemas de drenaje, programas de gestión de ahorro hídrico, el uso de aguas regeneradas y la instalación de sistemas inteligentes de riego con 1.200 aspersores controlados desde 19 ordenadores distribuidos por el campo con estación meteorológica propia.
Todo se mide buscando la sustentabilidad
Con todos los parámetros que ofrece este sistema, el Head Greenkeeper se apoya en una fórmula matemática-hidrológica, que incluye factores tan variables como la temperatura, la humedad relativa, el viento, la radiación solar o el agua disponible en el suelo para optimizar el uso del agua y variar el caudal y el tiempo de riego de cada aspersor en función de los requerimientos hídricos de las distintas zonas.
Además, el campo cuenta con drenajes capaces de llevar el agua sobrante del riego o de las lluvias a los cinco lagos interconectados que la inyectan de nuevo en el sistema consiguiendo un ahorro que supera el 15%.
Sólo agua reciclada
A ello se suma que Palomarejos Golf se abastece con agua reciclada gracias a sus dos estaciones depuradoras, lo que reduce el uso de fertilizantes inorgánicos y lo convierte en un campo sostenible y ecológico, dado que gran parte de las sales disueltas sirven para alimentar a las plantas y al resto de microorganismos presentes en el suelo.
La directora de Palomarejos Golf, Beatriz Hesse, explica que “estamos muy sensibilizados porque tenemos la obligación de asegurar un recurso tan importante como es el agua” poniendo de manifiesto que Palomarejos Golf es un santuario medioambiental para cientos de ejemplares de diferentes especies animales y miles de organismos vegetales que consiguen un efecto purificador sobre el aire y el agua.
Fuente: Redacción/ Palomarejos Golf